jueves, 30 de septiembre de 2010

DIOS SE CORTARÁ LAS VENAS


Dios ha cogido unas cuchillas de afeitar,
Porque está harto de todo
Y el Omnipotente no puede más.
Si Dios tiñe de sangre la tierra,
Con sus venas abiertas al día,
Un mundo sacrílego ha de renacer.

Sobre una madre muerta, llora un niño.
Rezuma el olor de podredumbre de los cuerpos
Que se hallan tirados por los campos de amapolas.
Alguien le ha cortado el cuello al cisne
Y ha estrangulado al ruiseñor.
Los pájaros ya no cantan,
Son asesinos de vidas en suspensión.

Dios se cortará las venas,
-la anciana divinidad está cansada-,
y un frío devastador se colará por las almenas de los cielos
sin dejar más rastro que un fuerte olor a muerte.
Las calles quedarán adornadas de cadáveres y metralla
Con niños sonámbulos jugando a “polis y cacos”.

Sobre una madre muerta, grita un niño.
“El cuello que se descuella”,
con la criatura entre los brazos,
no deja de aullar como una perra,
porque ya se llevan a enterrar en una cajita blanca
a la niña que traspasó el umbral de la alambrada.

La sangre de Dios moja la tierra
Y todo se vuelve putrefacta descomposición de ayes y asfalto.
El niño desnudo que venía para celebrar el año nuevo
Ha sido ejecutado “a las cinco de la tarde”.
La hora machadiana de la melancolía es una paloma negra
A punto de dispararse contra el corazón de la tierra.

Ahora que “Dios ha muerto”,
Apuremos nuestros vasos antes de que suene la sirena.
Instalémonos en nuestras cloacas como ratas,
Mientras, poco a poco,
Vamos perdiendo los ojos que ya no aparecerán
En los refugios sin Dios.

2 comentarios:

  1. Buen trabajo, con tu sello marcado a fuego, como una hoja de acero riendo a carcajadas sobre las venas.
    Ruma.

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  2. Hola Lucia, compruebo que el anonimato de Dios desaparece en una tensa calma de asesinos invisibles, el suicidio siempre ha sido cosas de valientes, para el que no tiene fe, para los agnósticos o no creyentes.

    Beso.

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