martes, 22 de marzo de 2011

MIRAD MI CUERPO




Mirad mi cuerpo sin lujuria y sin vergüenza.
Liberado, al fin, de mentes lascivas y ojos desdeñosos.
Soy la mujer evaporada de vuestros sueños
Que se ha vestido con el grito del niño,
Con la pared deslumbrada, con la súplica del pájaro.


Mirad mi cuerpo cómo llora.
Las encendidas luces de mi casa,
Miradlas.
Dentro de mi hogar ya no hay fuego que alumbre.
Sólo arde y arde la estopa de los días.

Mirad mi cuerpo cómo grita.
La lenta caricia de la madrugada traidora
Se llevó a mi amante lejos de mi lecho.
Lágrimas tengo en los ojos incendiadas.
Miradlas.

Mirad mi cuerpo cómo suplica.
Mirad mis heridas, todas ellas.
Donde el lamento se torna oración,
Yo pondré un beso en tus manos.
Miradlas.

Mirad, al fin, desnuda y deshecha de mentiras,
La desnudez que se abre paso en la inocencia.
Mi cuerpo, galería del pensamiento,
Se abre para combatir vuestras aberraciones.
Es mi cuerpo. Miradlo.

Lucía Fraga.

2 comentarios:

  1. Hay que "irse" al infierno y poder volver, como los héroes, para hacer de la desnudez un desgarro, para iluminar que ese cuerpo "deseable" es más que eso, es el blanco de las balas y está pleno de heridas. Un abrazo.

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  2. Dices:

    "Mirad, al fin, desnuda y deshecha de mentiras,
    La desnudez que se abre paso en la inocencia.
    Mi cuerpo, galería del pensamiento,
    Se abre para combatir vuestras aberraciones.
    Es mi cuerpo. Miradlo."

    Y no puedo más que negar, y negar. No creo que nadie tenga derecho a la inocencia. ( ¡Y líbrenos la vida de cuerpos inocentes! Los cuerpos inocentes se visten con sudario. ¡Dádme cuerpos culpables, como el mío)

    No se me ocurre ninguna aberración del cuerpo a la que combatir. Son las aberraciones del pensamiento las que me intimidan.

    S.

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