jueves, 14 de abril de 2011

OLIMPO DE HORMIGÓN


En mi mente revolotean mariposas de vidrio,
Mientras alguien llora en el Olimpo esta noche.
Quizá algún dios haya perdido los favores de Venus.
Yo sacrificaré una pareja de palomas blancas en su nombre.
Ha llegado la hora del adiós.

Apolo y Dafne follan sobre un raído colchón
En una casa ocupa donde Zeus viola a Leda.
El ávido cisne ha desflorado a la doncella,
Entre jeringuillas y condones usados.
Ha llegado la hora.

Que despierte Baco y nos embriague con su vino
De viñas dulces que se venden en tetra-bricks baratos.
El suelo está cubierto de sangre en este Olimpo de hormigón y miseria.
“Sangre de la alianza, nueva y eterna” que
unge nuestros pechos de héroes de papel.

El cielo se cubre con un gesto violento del “amontonador de nubes”.
Ya nadie canta en el Templo de los Dioses.
Ya nadie bebe néctar.
Sólo se bebe la sangre del enemigo
Y se revuelve en las basuras en busca de ambrosía.

Ha llegado la hora del adiós a los dioses.

Lucía (de) Fraga.

3 comentarios:

  1. Sobre todo, que despierte Baco, que más que nunca es necesario tomar para olvidar lo que sucede.

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  2. Cabría decir, también, que se pueden encontrar hermosas flores en los basureros. Y que bajo el asfalto de la ciudad se pueden plantar rosas. Sólo hace falta levantarlo.

    Sulleiro

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